2×40 Consejos sobre domótica

Hoy despedimos temporada y como puede que alguno esté pensando dedicar estos días de vacaciones veraniegas a iniciarse en la domótica casera, he decidido dejarte el mejor consejo que nadie te dará nunca sobre ese tema. Ahí lo dejo.

Y sí, despedida de est segunda temporada, en el redondo capítulo numero 40 y al final del capítulo te cuento las razones, hago un poco de balance y te doy fecha de regreso. O no. Tendrás que quedarte hasta el final.

Te cuento más el el boletín del domingo así que ¡Suscríbete!

El Apple Pencil

Lee el podcast – La transcripción

Te dejo la transcripción del podcast y, como siempre, dos notas importantes:
· Este texto no está escrito para ser leído, es una transcripción de un discurso hablado, por lo que no esperes la coherencia y estructura deseables en un texto para leer.
· Esto es una transcripción automática. No esperes que sea perfecta porque, a día de hoy, no voy a dedicar tiempo a repasarla.
Aclaraciones hechas, aquí te dejo el texto y si tienes a bien cualquier comentario, siempre están abiertos.

(Transcrito por TurboScribe.ai. Actualizar a Ilimitado para eliminar este mensaje.)

Hola, ¿qué tal? Yo soy Dagarin y en el último capítulo de la temporada te voy a dar el mejor consejo que te va a dar nadie si quieres introducirte en el mundo de la domótica, como siempre, desde mi punto de vista. Pues sí, has oído bien, el último capítulo de la temporada, luego te contaré por qué, pero primero te voy a hacer el spoiler final del mejor consejo. Esto cualquier youtuber te dirá que es lo último que tienes que decir, que te guardes este secreto para el final, que acabo de crear un clickbait maravilloso, etcétera, etcétera.

Pero yo soy así, hago las cosas desde mi punto de vista y a mi manera. Y a mi manera significa que te voy a decir que si el mejor consejo que te puedo dar, si estás pensando meterte en domótica para la casa, es que no te metas, no te metas en esos líos, a no ser que tengas mucho tiempo, muchas ganas, y te apetezca cacharrear con este tipo de cosas. Te cuento, ¿vale? Suena duro, pero es que es así, te cuento.

Yo hace ya mucho tiempo que estoy metido en domótica en casa, lo típico, empiezas con una bombillita, con una luz, tienes a Alexa, ahora, perdón, ahora que llega el verano, igual te estás planteando, ay mira, ya que tengo a Alexa aquí muerta de asco y le digo que me ponga música, le pongo un temporizador, le pongo no sé cuánto, tal, hago tres cositas, vamos a darle más vidillas. Voy a poner una lamparita de estas monas que se encienden y le digo, cuchufleta, pon en marcha, pon la luz en ambiente, en modo puticlub, y ella te lo hace, y cosas así. Y sí, es mono, seguramente va a funcionar, te vas a comprar una lamparita, pero seguramente te vas a meter a decir, pues voy a poner la lámpara del salón, qué tal, y voy a poner el aire acondicionado, qué cual, y voy a… y entonces van a empezar a aparecer en tu vida conceptos como Zigbee, Thread, Mater, marcas como Hue, Akara, Sonoff, Homebridge, Home Assistant, y la madre que los parió a todos, y tu vida va a empezar a ser un pequeño suplicio, porque tú vas a querer que todo funcione, vas a aprender conceptos como un concentrador, como un Hub para dominarlos a todos, y te vas a volver loco.

Te lo digo por experiencia propia, que llevo muchos, muchos años con eso. Por desgracia, la domótica debería ser mucho más sencilla de lo que resulta hoy en día. ¿Cuál es el problema? Pues las marcas.

Cada marca hace su dispositivo, tiene su sistema, sus propios sistemas, y quiere que compres lo suyo. Con lo cual, sí admiten cierta compatibilidad, sí admiten ciertas cosas, pero hay otras cosas que no. Es decir, habrá bombillas, por ejemplo, que puedas conectarla a un concentrador de Philips, pero que como la ha comprado de una marca china, te estoy contando ejemplo propio, pues resulta que los controlarás desde la aplicación de Philips, pero Philips no se la va a pasar porque no le da la gana a tu HomeKit de Apple, por ejemplo, porque dice, no, no, yo me apaño con ella, pero yo no me fío de dársela a Apple.

Yo pensaba que era tema de Apple, pero cuando te vas metiendo en el resto de ecosistemas de marcas y de historia, te vas dando cuenta que no, que cada marca pretende ser de su padre, de su madre, y que cuando entras en ella, te quedas en ella. Es muy difícil hacer funcionar cacharros de diferentes marcas. Por ejemplo, todos estos dispositivos, hoy en día, te hablo de la experiencia de hoy en día, hasta que Thread y Matter no se pongan las pilas y empiecen a funcionar, necesitan su propio concentrador.

¿Qué significa esto? Pues significa que necesita un dispositivo como el anillo, ¿no? Un anillo para dominarlos a todos, ¿no? Pues un dispositivo, un concentrador para controlarlos a todos. Necesitas un cacharro en la casa donde se conecten todas las bombillas de Philips, por ejemplo, y los diferentes dispositivos, los interruptores, el sensor que coloques en la puerta, la camarita de seguridad, la lamparita que te compres, todo lo que te compres, necesitarás un concentrador donde todo se coloque. Y leerás por ahí, ah, pero si es ZigBee, los dispositivos de Amazon tienen ZigBee, son compatibles y tienen un concentrador.

Yo lo voy a conectar aquí. Y sí, es posible que después de muchísimo sufrimiento lo consigas hacer funcionar. Pero no va a funcionar como debería y no va a funcionar bien.

Y cada vez que quieres emparejar un dispositivo, tienes que hacer cosas tan extrañas como apagar y encender la bombilla cinco veces en menos de cuatro segundos. ¿Vale? O sea, ojo a lo fácil que te lo ponen. Todo muy sencillo.

Y todo va en ese plano. ¿Qué decides entrar con Ikea? Pues tiene su Traffic, que es su concentrador también propio. Y ahí puedes conectar todas las bombillas y los altavoces y todo lo que tenga que ver con Ikea.

Que también utiliza el protocolo ZigBee. Ya te he dicho que hay palabras raras. Pero no, no es igual que el otro, no va a funcionar igual que el otro y vas a necesitar un concentrador independiente.

Y así con todo, me da igual que tengas un iPhone, me da igual que tengas un Android, me da igual que utilices Amazon para los dispositivos de Amazon, los Echo, me da igual que utilices un iPod mini, un iPod mini, no me suena. Un altavoz de estos pequeñitos de Apple, me da igual lo que quieras utilizar. Va a ser un auténtico quebradero de cabeza.

Y ya si entramos con las cámaras, ni te cuento. O con temas de seguridad. Yo, por ejemplo, he conseguido que todo en el SmartThings del iPhone, todo lo que tenga que ver con Philips funcione, menos el sensor de la puerta.

¿Por qué? Pues porque no es compatible con SmartThings de Samsung. ¿Por qué? Pues porque a Philips no le ha dado la realísima gana. Y tú ves una lista con 700 dispositivos compatibles y el sensor de puertas de la marca que tiene que todo es compatible, ese en concreto no es compatible.

Y así todo. Si te hablo de cámaras de seguridad, ni te cuento. O sea, ten claro que vas a tener una carpeta en tu móvil con un montón de aplicaciones, la de la cámara tal, la de la cámara cual, la de los dispositivos Philips, la de las luces de atrás, la de… vas a tener 70 aplicaciones diferentes.

Y sí, conseguirás automatizaciones porque esa es la gracia de de la domótica, por lo menos para mí, esa es la gracia de la domótica en la casa. Que tú entres por la puerta y bien sea por el sensor o bien sea porque te geolocalice, cuando llegues, por ejemplo, si es de noche, está encendida la luz, en mi caso, una luz del pasillo, una luz del salón, la luz de la cocina y la luz de la mesita de noche. Porque yo lo quiero así.

O que si tú le dices pues vámonos para la cama, pues te encienda las luces que tú consideras oportuno. Ese tipo de automatizaciones son las que al final tienen su gracia. Y lo conseguirás, pero sufrirás.

Entonces, una vez contado todos estos problemas que tenía aquí anotado, ya sabes que me gusta anotar últimamente las cosas, te voy a dar un par de consejos que sí ya son más reales, si realmente, bueno, llega el verano y te apetece domotizar un poquito tu casa y hacer unas cositas, unas cuantas cositas chulas. La primera y principal. Decide qué asistente vas a usar, el que quieras.

El de Amazon, el de Google o el de Apple. Perdona que no diga los nombres, porque si tengo aquí dispositivos por la casa que empiezan a hablar cuando los nombro. Decide el que quieres, el que sea, el tuyo, el que funcione, pero decidete por uno y concéntrate en ese.

Mi consejo, y esto son como siempre cosas desde mi punto de vista y experiencias personales. Amazon. Utiliza Amazon porque es el que más tranquilidad te va a dar, el que más compatibilidad te va a dar con casi todos los dispositivos.

No es el más bonito. Hay cosas que se les carpan, como por ejemplo la geolocalización, pero es el más compatible con el 95% de los dispositivos que tengo. Yo creo que solamente hay uno o dos que no he conseguido que funcionen con Amazon.

Todos los demás funcionan. Con Smartthings de Samsung o con Google Assistant, depende del día que tengan, depende de si el dispositivo es verde, amarillo, rojo o lo que sea, funcionan o no funcionan. Con Apple ni te cuento.

O sea, ya he tenido que montar un cacharro, un ordenador, digamos, en la casa especial, donde conectarlo todo. En fin, eso es una película. Eso o lo siguiente que iba a decir.

Decide si has decidido que sea, por ejemplo, Apple. Nos ponemos el caso más complicado. Ese va a ser tu asistente porque estás en el ecosistema Apple a tope, a tope con Apple.

Pues asegúrate que coges una marca que sea 100% compatible con Apple. Philips suele ser de las más compatibles. Acara dicen que también es compatible, pero es más complicado.

IKEA también es compatible, pero mi experiencia ha sido bastante perruna. No funciona tan bien que debería funcionar. Así que asegúrate que la marca que escoja, tanto si es Apple como la que sea, usa una marca.

¿Qué decides que sea Acara? Todo Acara. Compra un concentrador Acara, compra las bombillas de Acara, compra los interruptores de Acara, compra los sensores, todo que sea Acara. ¿Qué decides que sea Philips? Cómpralo todo Philips.

No intentes calentarte la cabeza como yo estoy haciendo. De intento, esta bombilla me cuesta 15 euros en IKEA y un paquete de tres y me cuesta el mismo paquete de tres, me cuesta 50 euros en Amazon, en Philips. Antes de empezar, decide qué presupuesto tienes, cuánto te quieres o te puedes gastar y decís bueno, pues tengo que optar por este sistema.

Y a partir de ahí, a muerte con ese sistema. ¿Qué has decidido Acara? A pechuga con las consecuencias. Si tienes que esperar una semana que te lleguen los cacharros porque no están en la tienda de abajo, a pechuga con eso.

Pero toma esa decisión. Si has decidido irte a IKEA, pues sabes que tienes que ir a IKEA a comprar los cacharros y meterte en la cona y perderte en el mundo de IKEA. Pero escoge una marca, no intentes mezclar.

Y el tercer y último consejo, armate de paciencia, por favor. No te frustres, armate de paciencia, dedica tiempo. Ten claro que vas a tener que dedicar tiempo.

Y también te digo como punto final, que cuando funciona es sumamente satisfactorio. Que tú llegues a la casa, abras tu llavecita y automáticamente tengas las luces del pasillo encendidas. El aire acondicionado se haya encendido, por ejemplo.

Que tú salgas de la casa y sepas que se están apagando todas las luces. Que tú estás en la cama y apagues todas las luces de la casa, por ejemplo, sin problema. Que yo le diga, cuchufleta, voy a grabar un podcast y automáticamente me apague luces, me encienda otra, me ponga en marcha.

Es decir, todo ese tipo de cosas, francamente, es muy gratificante. Así que, armate de paciencia, escoge una marca y escoge una asistente. Y de ahí no te salgas.

Y una vez concluido con esto, lo otro que te he anunciado al principio. Último capítulo de la temporada. Quería continuar un poquito más, hasta terminar el mes de julio, pero me parece que hemos llegado al capítulo 40, con lo cual es buena, es una cifra muy redondita para acabar una temporada.

Pero sobre todo me estoy encontrando con un problema bastante más serio que tú no conoces, pero yo sí que es esta habitación. Se me ha ocurrido montar este estudio en una habitación donde el sol da desde las 12, 12 y media de la mañana hasta que se pone. Donde no tengo aire acondicionado montado, donde me es imposible poner un ventilador porque ahora mismo estaría escuchando el sopro del ventilador.

Y aparte de que yo paso aquí un calor tremendo, yo soy una persona tremendamente calurosa, la cámara está sufriendo un montón. Apenas me da 20 minutos de grabación, tengo que encenderla justo cuando voy a empezar a grabar, porque se calienta y directamente se apaga. De hecho, del último capítulo he tenido que grabarlo en varios días, he tenido varias veces que intentar, porque se ha apagado la cámara.

Esto es para divertirme y no es para estar sufriendo ni aquí, muerto de calor. Que no sé si lo aprecias, pero estoy sudando y lo que me queda. Y aparte tampoco quiero hacer sufrir la cámara más de la cuenta.

Hemos tenido 40 capítulos, que yo creo que está bien. No ha estado mal, hemos tenido un poquito de todo. Y la siguiente temporada empezará, espero, en septiembre.

Digo espero porque tengo lo que llaman post-phase, un poquito de post-phase, un poquito de desánimo con el podcast. No desánimo, sino que me estoy planteando realmente con todo lo que tengo alrededor en mi vida, si me merece la pena dedicar tiempo a grabar podcast toda la semana, porque estas cosas ya sabes que me las tomo en serio. Entonces yo no voy a dejarte un jueves sin tu podcast, o el día que decidiera, porque me saldría muy mal.

Entonces no sé si me va a seguir compensando el podcast o no. Si te digo que el boletín va a seguir, creo que va a seguir todo el verano, que no voy a parar ni siquiera en agosto y que volverá el boletín. Pero el podcast aquí se queda aparcado y no sé hasta cuándo se quedará aparcado.

Igual volvemos a mediados de septiembre, igual tienes algún capítulo suelto por ahí durante el verano, ya veremos. Pero de momento, segunda temporada terminada. Espero que te haya gustado, espero que lo hayas disfrutado.

Yo, a pesar de lo que te digo, de que tengo muchas cosas que me lo impiden ahora mismo, he disfrutado mucho grabando el podcast y he disfrutado mucho contándote estas cosas. Así que José Luis y yo te decimos que te deseamos muy buen feliz verano, muy buen verano, muy felices vacaciones si las tienes, etcétera. Disfruta y supongo que nos vemos pronto.

Un saludo.

(Transcrito por TurboScribe.ai. Actualizar a Ilimitado para eliminar este mensaje.)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio