La magia de Pixar (I): El sueño

Por la fecha en que se hizo, debió ser allá por 1987 o 1988 cuando vi el primer corto de Pixar. No era el primero que hacían, pero si el primero que descubrí y me impactó. Tenía yo 18 años o así, andaba estudiando informática y descubriendo que esta informática que estaba aprendiendo no era la que yo soñaba. Esta hablaba de procesos productivos, colas, contabilidad, stocks… y la informática que a mi me gustaba era la de los pixels, los sprites, los gráficos con colores cutres. Yo veía cada vez que podía todos los festivales de cortometrajes de animación hecha por ordenador que ponían en la tele y pensaba que eso era lo que yo quería hacer.

Casi todos eran más bien demos técnicas: animar fluidos, tejidos, cómo crear sombras, texturas. Pocos cortos realmente contaban una hitoria, y de repente surgió este Red’s Dream.

 

Os aseguro que la calidad de este video no le hace justicia, pero no lo encuentro mejor. Hablamos de hace mas de 20 años, hoy estamos muy acostumbrados al fotorealismo en las escenas generadas por ordenador y cualquier juego genera mejores gráficos en tiempo real de los que vemos en este video. Y aquí cada fotograma (recordemos que hay 25 en cada segundo) de las escenas de la tienda, tardaban varias horas en generarse. Eran otros tiempos momentos en los que se estaba inventando todo lo relacionado con la animación 3D, en los que se exploraba una nueva forma de arte y de contar historias gracias a los ordenadores. Y dentro de ese hervidero de ideas y de intenciones surgió la unión de tres grandes nombres.

Todo comenzó unos años antes, cuando un tal Edwin Catmull, un especialista en técnicas de computación, fue fichado por el señor George Lucas para crear un grupo de personas encargadas de investigar como incorporar tecnologías digitales a la edición de videos y los gráficos generados por ordenador al mundo de espectáculo. No lo he presentado, pero supongo que sabéis que George Lucas es uno de los chicos de oro de Hollywood, sobre todo en aquellos años, con la saga Star Wars en pleno apogeo y ganando dinero para reventar. Una de esas mentes capaces de adivinar lo que la gente quería ver para divertirse, aunque tuvo un pequeño despiste que luego comentaré.

Pues este tipo, este tal Edwin, era el típico cerebrito, esa mente capaz de descomponer un muro de piedra y convertirlo en ceros y unos, descomponer una mano en polígonos para que, mediante fórmulas matemáticas, se pudiera simular movimiento. Ya dentro del grupo LucasFilm desarrolló grandes técnicas para ayudar a conseguir la integración de imágenes generadas por ordenador con las imágenes realas. Lo que se dice un pequeño genio que, además, es de los que más en la sombra a permanecido siempre en toda esta historia.

El personaje más conocido de este trio, la cabeza más visible, siempre ha sido John Lasseter. Un señor con gafas, simpaticón y que nunca ha tenido problemas para mostrarse en público. Mientras que Edwin Catmull vivió un camino mas o menos de rosas, lo del Lasseter fue algo más accidentado. Tras terminar los estudios comenzó a trabajar en Disney como animador 2D, que es lo que había entonces. En el 81, al ver las primeras escenas generadas por ordenador que se estaban haciendo para Tron, las de las motos de luz, se quedó impresionado y vio claramente que el futuro de la animación pasaba por eso, por evolucionar la animación de toda la vida hacia ese tipo de gráficos. Intentó hacer valer esas ideas en Disney con algún que otro proyecto pero no consiguió llevar ninguna a buen puerto hasta que finalmente fue despedido. Continuando con su visión, fue a entrevistarse con Edwin Catmul, aún dentro del conglomerado de Lucas, y comenzó a trabajar en Lucasfilm Computer Graphics Group, donde realizó su primer corto de animación con ordenadores, Las aventuras de André y Wally B.

Si, ya se que es absurdo y ridículo a día de hoy, pero volved hace más de 25 años, cuando apenas existía el concepto de PC como algo muy vago y en lo que apenas confiaba nadie. Años donde que un ordenador fuese capaz de mostrar una imagen en color era casi impensable. Y ahí estaba Lasseter, inventando como aplicar lo aprendido en Disney sobre como contar historias mediante la animación, a las nuevas tecnologías. Y estaba inventando algo como Pixar.

¿Sabéis donde estaba uno de los primeros frutos de esta empresa? Crearon un ordenador llamado Pixar (el ordenador, aun la empresa no tenía este nombre) y se utilizó para crear al hombre de la vidriera de la película «El secreto de la pirámide». ¿Lo recordáis? Fue la primera vez que la infografía se mezcló con imagen real de esa forma y supuso, por supuesto, una gran revolución.

Y falta un tercer nombre, que sé que muchos sabréis pero a otros os sorprenderá. Pero mejor seguimos mañana, ¿no? Es que se está haciendo tarde.

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