¿Prohibir o no prohibir los móviles en los colegios?

Esa era la cuestión hasta hace unas semanas. Una campaña que se inició a principios de este curso para que se prohibiera a los alumnos en el uso de los móviles en los colegios. Empezó, si no me falla mi frágil memoria, en Cataluña, pero se ha extendido por toda España.

En Andalucía, por ejemplo, si que está totalmente prohibido el uso de los móviles en los colegios en horario lectivo desde finales de 2023. En otras autonomías se estudia o hay leyes similares. Pero recientemente ha surgido una iniciativa que quiere impedir que los menores de 16 años tengan acceso a un teléfono móvil. ya no hablamos de móviles en los colegios sino de que unos padres no puedan comprarle un móvil a sus hijos por ley, como no pueden darles alcohol, por ejemplo.

Y de eso te quiero hablar, que tengo mi punto de vista y que mejor sitio para exponerlo que aquí.

La ley seca del móvil

Está demostrado que la prohibición de algo no suele hacer desaparecer ese problema sino que genera otros problemas que pueden ser mayores. Desde la famosa Ley Seca en Estados unidos a principios del siglo XX, donde se prohibieron las bebidas alcohólicas y que sólo trajo un mercado negro y mafias suministradoras de alcohol, con los peligros que eso conlleva.

Hablemos de cualquier otra prohibición, la que sea, que al final acabará generando un uso peligroso de esos productos. Por tanto, parto de la base de que yo, en general, soy poco partidario de prohibir. Soy más de educar y de regular de manera lógica que de prohibir radicalmente. Más aún cuando hablamos de productos que, antes o después, los jóvenes van a tener que utilizar. Por tanto la cuestión no es una ley saca móvil, sino algo mucho más complicado: educar y concienciar.

¿Móviles en los colegios?

Nos cuentan que precisamente los grandes gurús de las tecnológicas estadounidenses llevan a sus hijos a escuelas específicas donde no se utilizan pantallas. No digo móviles, digo pantallas. Nada de internet, videos de apoyo, multimedia… hablo de pizarra, papel y lápiz para escribir. Y oye, me parece muy bien. Hay que estar a lo que se está y es cierto que el cerebro tiene que formarse de una forma más primitiva al principio. Luego ya nos haremos cómodos con la tecnología.

En otras muchas escuelas se está imponiendo una moda de poner bolsitas de seguridad en la entrada y que cada alumno que tenga móvil lo guarde ahí al entrar a las clases y sólo le recupera en caso de fuerza mayor o cuando sale del colegio. Está claro que los móviles son una fuente de distracción y prohibirlos durante las clases no lo veo mal. Eso sí, ¿es necesario confiscarlos? Para mi debería ser más que suficiente enseñarles que está prohibido. Es más, no sólo les enseñas a estar sin el móvil sino que estás enseñando una norma de educación que debería ser básica y que debería servirle para el futuro: que los móviles no se utilizan cuando estás en otras tareas.

Para mi, tema zanjado con lo de prohibir los móviles en los colegios: no deberían existir durante el periodo lectivo. Los padres deberían enseñarles a los hijos a no llevarlos o a usarlos sólo para comunicarse con ellos si pasa algo. punto. Ni siquiera deberían intervenir los profesores, es algo que se debe aprender en casa. Igual que los niños aprenden a ir vestidos en sociedad, a no pegar, a decir hola y adiós. Normas básicas que no deberían tarea.

Otra cosa es prohibir los móviles a los menores. Ahí discrepo.

Prohibir los móviles a los menores

No, no estoy de acuerdo en su prohibición, estoy totalmente de acuerdo con su educación. La única diferencia entre un móvil y un ordenador es que el móvil es más personal y accesible pero el problema existe en ambos, si es que queremos llamarlo problema: Internet. Y más que internet, todo lo que en ella habita. Redes sociales, violencia, pornografía, juego online, ciberacoso,… Y esos problemas no van a desaparecer porque el niño no tenga acceso al móvil, en absoluto. En casa cogerán un portátil, o la tablet, o la misma tele, que suelen tener navegadores. Pero todo esto da igual.

Puede que seas un padre o una madre muy concienciado con este tema y me parece estupendo que así sea. Que tengas todas las medidas de protección a tu alcance para controlar que tus hijos no accedan a ciertos servicios, que utilicen las pantallas con contención y en horarios concretos, y todo esto está genial. Pero de repente tu hijo cumple 16 años, tiene unos ahorros que ha guardado de la comunión y de lo que los abuelos le dan a escondidas de vez en cuando y lo primero que hace es comprarse un móvil. Por su cuenta, ya es legal y puede hacerlo. Ni siquiera tiene que contratar una tarifa de datos si no tiene ingresos, ya irá tirando de las WIFIs abiertas, que haberlas las hay, o pedirá prestado a sus amigos.

Tu hijo acabará de caerse del nido a una jungla llena de leones, cocodrilos, serpientes y todo tipo de peligros que desconoce. Porque esos 16 años ha vivido en un remanso de paz, ¿como se defiende ahora de todo eso si no sabe ni lo que es?

Y los peligros son muchos

Educación, educación y educación

Ya te digo, no soy partidario en absoluto de las prohibiciones, soy partidario de la educación. Llegado el momento, que cada padre/madre deberá establecer según considere oportuno, habrá que decirle al niño que además de videos de Pepa Pig y Pingu, en ese cacharrito que le dan para que no molesten mientras los padres charlan con los amigos o trabajan, hay más cosas. Tendrán que explicarles qué es una red social, que gente hay ahí, que no todo el mundo es bueno y que lo mismo que no deben coger caramelos de un extraño, no deben aceptar la amistad de cualquiera.

Habrá que enseñarles qué es acoso, que es ciberbulling, que la gente que pide fotos raras es gente rara, que tienen una contraseña para entrar en su cuenta de correo y que no se la pueden decir a nadie, qué es el factor de doble autenticación, qué puede pasar dentro de 5 años cuando esté buscando trabajo y un encargado de selección de personal revise sus redes y vea que con 18 años se dedicaba compartir videos suyos riéndose de los compañeros o haciendo tonterías en la playa con los colegas estando de botellón.

Decirles que las redes son maravillosas y peligrosas. Que no tiene que estar en las redes si no le apetece, que no se pierde nada. Qué es la privacidad, como cuidarse de las estafas, que bloquear temas y/o personas es sano. Que no se debe creer todo lo que lea por ahí

Todo eso es educación. En el entorno familiar y escolar. Leo mucho el meme que dice «otro día más sin usar el mínimo común divisor o el máximo común múltiplo». Y es cierto. Está bien que en el colegio se enseñe de todo. Matemáticas, lengua, ciencias naturales, arte, educación física,… pero hay materias que deberían ser troncales, como tecnología o incluso educación mental. No sólo de triángulos isósceles o de pretéritos pluscuamperfectos se vive. Es muy necesario dar una formación completa.

Educación sí. Prohibición, con mucho cuidad para no provocar el efecto contrario.